Juan Manuel López es uno de los referentes de la Coalición Cívica en la Cámara de Diputados. Estuvo en el recinto durante el debate de la llamada “ley de solidaridad” del Poder Ejecutivo y se mostró crítico sobre el tratamiento del proyecto, tanto como de su contenido.
-¿Qué le pareció el debate por la ley de solidaridad?
-Fue un debate muy apresurado, bastante mal planteado. Los funcionarios que fueron al plenario de comisiones respondieron muy pocas preguntas. No formo parte, pero decidí participar para informarme y vi que muchas de las preguntas que hacían los diputados, directamente no eran contestadas. En poco más de 48 horas salió una ley. Entre las nueve de la mañana del miércoles y las tres de la madrugada del sábado no llegaron a cumplirse tres días completos. Me parece que así no debe debatirse una ley de esta envergadura, más allá de que no estoy de acuerdo con el contenido.
-¿Por qué?
-Porque delega demasiado poder en el Presidente, un poder que le corresponde al Congreso. En general estuvimos en contra de las delegaciones, además de declarar una nueva emergencia. Ni siquiera en el gobierno de Duhalde hubo tantas emergencias declaradas. Subir impuestos no me parece la mejor forma de salir de esto. Durante la campaña dijeron que se salía creciendo y es difícil imaginar que la Argentina pueda crecer subiendo bienes personales, contribuciones patronales, subiendo el tipo de cambio con un dólar paralelo, y además suspendiendo el pacto fiscal. Creo que esta política del Gobierno es desacertada.
-Pero la gente va a tener más plata en el bolsillo, los jubilados recibirán un bono, habrá un alivio.
-Poner más plata en el bolsillo de la gente me parece bien. El tema es que suspender la fórmula jubilatoria no garantiza más plata en el mediano plazo. Va a haber un bono, pero cuando se tenga que actualizar la fórmula, el aumento lo va a dar discrecionalmente el Presidente, y no sabemos cuánto va a dar. Además, el bono es para los jubilados de la mínima. Va a haber más plata para un sector, y eso está bien. Pero se va a achatar mucho la pirámide, y esto no garantiza más plata para todos en el mediano plazo, de acá a tres y seis meses, que es como se tenían que actualizar las jubilaciones. Veo difícil que funcione así la reactivación.
-¿Cree que los jubilados van a resultar perjudicados?
-Sí. En una entrevista con (el periodista Luis) Majul, el Presidente dijo: ‘nos dejaron la economía indexada, y nosotros vamos a desindexar’. Yo creo que las economías indexadas son producentes y quitarlo nunca va a ser beneficioso, porque queda a discreción del poder de turno. Quiere desindexar porque cree que no le va a alcanzar el dinero para cumplir con las obligaciones que tiene. Ellos decían que se sale creciendo y que no iban a pagar los sectores menos pudientes. Bueno, con estas políticas, seguro que los que reciben un plan social o una pensión van a terminar pagando.
-¿Cómo se resuelve el liderazgo dentro de Cambiemos? Hay muchos postulantes, Vidal, Larreta, Macri, los radicales…
-No es líder el que quiere, sino el que puede y trabaja. Creo que van a haber muchos liderazgos, al menos al principio. Sí, están Vidal, Larreta, Macri… Lilita, por más que esté corrida, tiene un liderazgo con la gente, al igual que Vidal. Hay muchos que las respetan y las tienen como referentes. Y está el liderazgo de los radicales, así que creo que cada uno va a ir ejerciendo y va a ir viendo quién es más líder que el resto. El líder es el que puede y el que trabaja para ser líder y esto hay que hacerlo todos los días. Además, en dos años habrá elecciones legislativas. Entonces habrá más liderazgos, o menos, pero con mayor claridad.
-¿Cómo vivieron el regreso de Carrió al Congreso?
-El regreso de Lilita al Congreso es siempre una alegría y una garantía… tenerla ahí ayuda a controlar más las cosas, porque es una voz muy fuerte. En la votación en particular marcaba más que nosotros, porque tiene una voz más poderosa. A pesar de que está corrida, la llamamos todo el tiempo. A pesar de que nos dice que decidamos más nosotros, cuando necesitamos un asesoramiento importante la llamamos a ella.
-¿Cada cuánto hablan?
-La llamé el día de la sesión, también el jueves y el viernes; y la semana pasada. Maxi Ferraro habla más seguido. Hablamos periódicamente, cada dos o tres días.
-¿Qué le pareció la designación de Félix Crous en la Oficina Anticorrupción?
-Me parece importante que la OA tenga reglas claras como ha tenido hasta ahora, más allá del nombre de la persona que ocupe el cargo. No me inspira la mayor confianza, pero creo que si sigue una línea de conducta, puede funcionar bien. Prestaría atención a que no cambie las reglas y siga atendiendo todos los conflictos de todos los funcionarios. Sobre todo, que los funcionarios presenten sus declaraciones juradas, y se las revise.
-¿Hubiera preferido que no tenga un color político marcado, y en especial del gobierno de turno?
-Lo hubiera preferido, sí, pero es un organismo técnico, y lo importante es que cumpla con su deber. Es un organismo de control interno, esto no hay que perderlo de vista. No quiero prejuzgar a Crous hasta no verlo desenvolverse en el cargo.