El enfrentamiento es inminente y algunos hasta llegan a hablar de ruptura. Esa es la situación en el peronismo bonaerense luego de la reunión del jueves. La situación del presidente del partido Fernando Espinoza se debilitó aún más y quedó en evidencia que los intendentes prefieren otro líder partidario.
Días antes, Noticias Urbanas adelantó el mapa interno del partido y los enfrentamientos que había.
La mayoría de los intendentes y la CGT acordaron una lista que en el primer año será encabezada por Gustavo Menéndez de Merlo como presidente del partido y Fernando Gray de Esteban Echeverría como presidente del Congreso del PJ. Luego, en el segundo año del mandato los roles se invertirán.
Menéndez llevará de segundo a su par de la Costa, Juan Pablo de Jesús, la propuesta de Martín Insaurralde para cerrar esa negociación.
Esa lista, también cuenta con el aval del sindicalismo. Héctor Daer, Omar Plaini, Pablo Moyano, el “Barba” Gutiérrez y otros gremialistas se sumaron a la lista, que también incluye a los principales intendentes del interior de la provincia y hasta randazzistas como Bali Bucca y Juanchi Zavaleta.
El objetivo de los intendentes era oponerse a la reelección de Espinoza. Frente a esa situación, el matancero decidió presentar lista con el camporista Walter Festa de segundo, a la que se sumaría Mario Ishii, intendente de José C. Paz. Sin embargo, a lo último desde La Cámpora le bajaron el pulgar a Festa con la cual la situación de Espinoza quedó complicada.
En la cumbre de jefes comunales de la Primera y la Tercera sección, Espinoza había logrado sólo dos votos de la mesa para continuar al frente de la franquicia bonaerense: el suyo y el de su sucesora en la intendencia de La Matanza, Verónica Magario.
La reunión terminó mal. Espinoza se enojó y se fue a la sede del PJ nacional de Matheu.
A pesar de la falta de apoyo y de la oposición de los intendentes, Espinoza no se baja. Esto llevaría a que se realicen internas el 17 de diciembre.