El Argerich colapsado: “Parece que fuera un hospital de guerra”

El Argerich colapsado: “Parece que fuera un hospital de guerra”

Un grupo de familiares de un paciente del nosocomio contó a NU la situación crítica que atraviesa el lugar y las pésimas condiciones de atención.


El Hospital Argerich, ubicado en el barrio porteño de La Boca, se encuentra en una situación crítica. La extensa espera por parte de pacientes que aguardan ser atendidos, falta de cuerpo médico e infraestructura, son los principales puntos que señaló un grupo familiares de un paciente que se atiende en ese nosocomio a Noticias Urbanas.

Estoy totalmente indignado. Ingresé a las 7 de la mañana por la guardia y no había nadie en la recepción. No hay seguridad, ni tampoco los que tendrían que estar dando los turnos. Todo estaba apagado”, indicó el familiar que no quiso dar el nombre, por motivos de protección ya que se atiende un familiar. “Había un grupo de 15 personas esperando desde antes de las siete de la mañana y a la media hora aparece un personal de seguridad que te manda a sacar número”, contó y aseguró que “donde hay que pedir los números no hay nadie”.

El hombre destacó a NU la ausencia de cuerpo médico: “Estaba pidiendo una silla de rueda para una persona que no podía caminar y me dijeron que no tenían, por lo tanto no podían dármela”. “Le pedí al encargado de seguridad si podía subir al ascensor y me respondió ‘pasas pero bajo tu responsabilidad. Ni siquiera los médicos me dieron ayuda viendo que estaba arrastrando a una persona enferma”.

Además, el joven indicó que hay personas que pasan la noche en el Argerich para que los puedan atender y conseguir número, pero que lamentablemente hasta las 8 de la mañana no hay atención. Una vez que pudieron asistirlo y le otorgaron una habitación para su padre, manifestó que el lugar “era un desastre. Parece que fuera un hospital de guerra o que brotó una epidemia”, haciendo referencia a las condiciones precarias que se encontraba el cuarto. “La pieza de mi viejo, que es la mejor, no tenía ni un foto de luz. Hasta te cobran $30 para la ficha del televisor”, aseveró.

En los primeros días de enero, el nosocomio había sido el lugar donde fue atendido el turista sueco de 36 años, Christopher Person, y donde había sido operado para amputarle una de sus extremidades debido al disparo que recibió en medio de un asalto.

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