La diputada Patricia Bullrich confirmó que el lunes se presentará ante la fiscal Viviana Fein para dar testimonio sobre cómo vio a Alberto Nisman un día antes de ser hallado muerto, y reiteró que el ánimo del fiscal federal no se compadecía, a su juicio, con el de alguien que presuntamente pensara en suicidarse.
En diálogo con DyN, la presidenta de la Comisión de Legislación Penal de la Cámara baja, adonde Nisman tenía previsto explicar su denuncia contra la presidenta Cristina Kirchner por “encubrir” a Irán en el atentado a la AMIA, ratificó que a las 10 del lunes se presentará en la Fiscalía de Fein, Tucumán 966, en esta Capital.
Bullrich acusó a la jefa de Estado de “victimizarse” en el caso de la muerte de Nisman, “cuando la víctima es el fiscal”, y repudió el reciente documento que el PJ difundió en defensa de la jefa de Estado al señalar que “usó el lenguaje de lo peor del peronismo, usó el lenguaje de la Triple A”.
“Me revolvió el estómago”, ilustró la diputada, al cuestionar duramente la declaración del Consejo Nacional justicialista del jueves pasado, en la que brindó su “enfático” apoyo a la primera mandataria y acusó de “golpismo” a jueces, medios de comunicación y un sector de los servicios de inteligencia, en relación a la desaparición de Nisman y las denuncias del fiscal.
Añadió que el documento “faltaba que hablara de la ‘sinarquía internacional’. Me impresionó muy mal”. Bullrich puntualizó que en las ocasiones que habló con Nisman desde el “miércoles al sábado” de la semana pasada, es decir, una día antes de que su cuerpo fuera hallado sin vida en su departamento de Puerto Madero, lo vio con una “actitud de compromiso, de trabajo, segura”.
“Nada que ver con una persona que uno podría pensar que está pensando en suicidarse”, señaló.
La legisladora reconoció que sí lo observó “preocupado por lo que podía pasar en el Congreso”, dada la “actitud hostil” que anticipó el oficialismo, resumida en la voz de la diputada oficialista Diana Conti, al avisar que ella y sus colegas iban a recibir al funcionario judicial “con los tapones de punta”.
“Yo con el fiscal no tenía una relación de amistad, sino profesional, pero lo vi como siempre: comprometido y decidido a avanzar en sus denuncias”, insistió.
