El secretario de Seguridad, Sergio Berni, aseguró este miércoles que “hay demasiada prueba” contra Jorge Mangeri, el portero detenido por el crimen de Ángeles Rawson, y confirmó que gestionó el alojamiento de la familia de la víctima en un lugar alejado de periodistas como “un gesto de humanidad”.
“Nadie protege a la familia”, sostuvo el funcionario, quien señaló que “nuestra función desde la Policía Federal fue resolver rápidamente la causa que estuvo obviamente dirigida por la fiscal (María Paula Asaro) y ahora por el juez (Javier Ríos)”.
Berni expresó que “donde vive” la familia de Angeles, en Ravignani 2360 del barrio porteño de Palermo, “está acechada por periodistas, la madre tiene que circular todos los días por el lugar donde se ha cometido el crimen”, por lo que quiso tener “un gesto de humanidad” con ellos.