Inmediatamente, los presidentes de los bloques opositores de Juntos por el Cambio Roberto Costa (Senado) y Maximiliano Abad (Diputados), publicaron una Carta Abierta a Kicillof, sugiriéndole la apertura de la información sobre las negociaciones y la necesidad de desarrollar políticas de consenso con la oposición en el marco de la negociación con los tenedores de bonos de la deuda externa bonaerense que contrajo María Eugenia Vidal.
“No puede ser que se vaya en medio de este problema gravísimo”, expresaron sus opositores el martes, cuando el avión aún no había llegado a destino. La respuesta de voceros del Gobierno fue categórica: “nuestros funcionarios están abocados día y noche a la resolución de este pasivo, de esta carga que dejó María Eugenia Vidal. No nos dejaron en las mejores condiciones y todavía quieren darnos clases de comportamiento. No resultan serios”.
Kicillof viajó con el presidente al Foro Internacional de Líderes en Conmemoración del Día Internacional del Holocausto y la Lucha contra el Antisemitismo. La invitación tiene que ver, entre otros temas, con que Kicillof es el dirigente político de la comunidad judía más importante de Argentina, un dato que fue soslayado por muchos de los que evaluaron la conformación de la comitiva que acompañó al presidente argentino.
En Jerusalén estarán presentes algunos de los lìderes mundiales más importantes, como el presidente ruso Vladimir Putin, el presidente francés Emmanuel Macron, el vicepresidente norteamericano Mike Pence y el príncipe Carlos de Inglaterra.
Entretanto, el miércoles los bonistas se expedirán acerca de la propuesta bonaerense. Si ésta fuera aceptada por los tenedores, quedaría descartada toda posibilidad de default.
